Existe una fascinación con las islas griegas en particular con Santorini. La realidad es que esta pequeña isla en el sur del mar Egeo, pertenece a un complejo de islas llamadas Ciclades, es hermosa y vale la pena visitarla.
Se estima que esta isla, en forma de media luna, emergió del mar para el 1613 AC por la erupción de un volcán creando la caldera de Santorini siendo la destrucción de la civilización prehistórica de Creta.
Puede llegar a ella via ferry desde Atenas o de otra isla griega o en crucero. Obviamente en cruceros el tiempo es más limitado, pero tendrá el suficiente para saciar la curiosidad y desear volver para quedarse más días.
He visitado Santorini en dos ocasiones, definitivamente llegar en crucero muy temprano y poder ver el sol levantarse e iluminando las casitas blancas en Fira es un lujo. Fira no solo es la capital de Santorini, sino es donde se ubica el Puerto Antiguo (Old Port). Diferente a otras la islas griegas, esta se encuentra en el tope de la montaña y para subir a ella, que está a 250 pies de altura, puedes hacerlo por teleférico o en burro. A mi no me gusta el concepto de obligar al burro a subirte por lo que esa experiencia no puedo contárselas. Siempre uso el teleférico aunque si quieres hacer un tremendo ejercicio también hay escaleras.
Si deseas pasar el dia en Fira, podrás cómodamente caminar por sus calles repletas de tiendas, cafes y restaurantes. Ahora bien para llegar a la parte más reconocida por sus atardeceres deberás hacerlo en vehículo de motor.
Oia (se pronuncial Ía) es sin lugar a dudas el lugar de las fotos emblemáticas. Las cúpulas azules que identifican las Iglesias, las terrazas de los hoteles estratégicamente ubicadas para los atardeceres, el color blanco de las casitas que constrasta con el azul del mar y las vistas impresionantes de las otras islas volcánicas, hacen valer la pena desplazarte hasta allá.
La gastronomía en las islas griegas es muy similar a la que puedes disfrutar en Atenas, los famosos gyros, ensaladas con pepino con queso feta y la pesca del día.
Una de las gratas sorpresas de nuestra última visita fue conocer más sobre su industria “vinicola”. Santorini es reconocido por sus vinos y viñedos de alta calidad que se han producido por las de 3,200 años. Cabe resaltar que Santorini está reconocida como una de las islas mejor organizada en el tema de turismo vinícola. A parte de las versions de vino blanco y tinto, el más famoso es el Vinsanto que es un vino rojo dulce, hay otras versiones muy reconocidas también como el Athiri, Aidani, Mandilaria y Mavrotragano.
Ya que Santorini es una isla donde no llueve mucho, han creado técnicas para mantener el abastecimiento de agua potable, de igual forma para las siembras de los viñedos y los olivos.
Sobre las playas les cuento que aunque el color azul del agua es inigualable, no comparan para nada con las del Caribe. Aún en agosto el agua es fria y no son playas con arena sino es piedras. Realmente amo el contraste de la arena blanca con el agua turquesa que se puede apreciar en otras islas griegas y en el Caribe. En Santorini se distinguen 3 playas principalmente: la playa Roja, la Blanca, identificadas por el color de las piedras y la Negra que se reconoce por la arena volcánica. Debo reconocer que el fuerte de Santorini no está en sus playas, ciertamente hay otras islas griegas con mejores playas.
Uno de los lugares que no nos dio tiempo a visitar es el hallazgo arqueológico prehistórico del Village de Akrotiri que fue encontrado debajo de las cenizas en un estado casi exacto. Este lugar arqueológico no es solo el más importante en Santorini, sino también en área del Egeo. Este lugar se estima que data de al menos en el milenio 4 AC. Para el siglo 17 AC esa ciudad quedó totalmente vacía por un fuerte sismo y sus réplicas
Ya para finalizar el día le recomendamos que no llegue muy tarde al área de Fira para tomar el teleférico de regreso al puerto ya que se encontrará con una fila larga. De igual forma, cuando compre el boleto para subir, asegúrese que lo compre de ida y vuelta así se evitará una fila lo que le ayudará a ahorrar tiempo.
Si tiene flexibilidad en el tiempo de viajar, evite visitar las islas griegas en el verano, particularmente en julio o agosto, no solo el calor es intenso, sino que estará llena de personas lo que hará que su experiencia no sea tan agradable.
Utilice zapatos y ropa cómoda, hidrátese, use protección solar y camine con precaución, las calles no son planas y utilizan piedras pequeñas (no necesariamente flat) en las calles lo que puede ser un poco incómodo.
La moneda oficial es el euro.
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